Sigue estos pasos detallados para lograr un perfecto rollo de bizcocho relleno de crema:

Preparación del Bizcocho:

1. Precalentar el horno: Precalienta tu horno a 180°C (350°F). Prepara una bandeja para hornear engrasándola ligeramente y cubriéndola con papel pergamino.
2. Separar las claras y las yemas: En dos boles separados, separa las claras de las yemas de los huevos.
3. Montar las claras a punto de nieve: Bate las claras con una batidora eléctrica hasta que se formen picos suaves. A medida que las claras comienzan a espumar, agrega gradualmente el azúcar (deja una parte para las yemas). Continúa batiendo hasta que estén firmes y brillantes.
4. Batir las yemas con el azúcar: En otro bol, bate las yemas de huevo junto con el azúcar restante hasta que la mezcla esté espesa y de un color amarillo pálido. Esto le dará al bizcocho una textura esponjosa. Añade la esencia de vainilla y mezcla bien.
5. Tamizar los ingredientes secos: En otro recipiente, tamiza la harina y el polvo de hornear. Esto asegura que el bizcocho quede ligero y sin grumos.
6. Incorporar la harina: Añade poco a poco la mezcla de harina y polvo de hornear a las yemas batidas, mezclando con cuidado para evitar que la masa pierda aire.
7. Incorporar las claras: Agrega una pequeña cantidad de las claras montadas a la mezcla de yemas para aligerar la masa. Luego, incorpora el resto de las claras con movimientos envolventes para mantener la ligereza.
8. Extender la masa: Vierte la masa en la bandeja preparada y extiéndela uniformemente con una espátula para que quede con un grosor uniforme.
9. Hornear: Hornea el bizcocho en el horno precalentado durante 10-12 minutos, o hasta que esté dorado y al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio.
10. Enfriar el bizcocho: Inmediatamente después de sacarlo del horno, coloca el bizcocho sobre un paño limpio espolvoreado con un poco de azúcar. Retira el papel pergamino y, con la ayuda del paño, enrolla el bizcocho con cuidado mientras aún está caliente. Esto ayuda a que mantenga la forma sin romperse. Deja que se enfríe completamente.

Preparación del Relleno:

11. Batir la crema: En un bol frío, bate la crema para batir junto con el azúcar glass (y la esencia de vainilla si decides usarla) hasta que se formen picos suaves. Ten cuidado de no batir en exceso para evitar que la crema se corte.
12. Reservar parte de la crema: Guarda una pequeña porción de la crema batida para usarla en la decoración del rollo.

Montaje del Rollo:

13. Desenrollar el bizcocho: Con mucho cuidado, desenrolla el bizcocho ya enfriado. Extiende una capa uniforme de la crema batida sobre la superficie del bizcocho.
14. Agregar las frutillas: Distribuye los trozos de frutillas de manera uniforme sobre la capa de crema.
15. Enrollar nuevamente: Vuelve a enrollar el bizcocho con cuidado, usando el paño para guiar el enrollado. Asegúrate de hacerlo lentamente para evitar que se rompa.
16. Decorar el rollo: Coloca el rollo de bizcocho sobre un plato para servir. Usa la crema batida reservada para cubrir el exterior del rollo y decora con más frutillas frescas, enteras o en rodajas, según tu preferencia.