Description
Esta receta de rollos de calabaza y canela es perfecta para aquellos que buscan un postre delicioso o un desayuno especial. Con ingredientes simples como harina, puré de calabaza, canela y queso crema, se pueden crear estos suaves y esponjosos rollos en un par de horas. La calabaza no solo añade sabor, sino que también contribuye a una textura más suave y húmeda. La combinación de especias —canela, nuez moscada, jengibre y clavo— aporta ese sabor cálido y reconfortante característico de los postres otoñales
Ingredients
Scale
Para la masa:
- 4 tazas de harina común
- 1/4 taza de azúcar granulada
- 1 paquete de levadura instantánea
- 1/2 taza de puré de calabaza (puede ser casero o enlatado)
- 1/2 taza de leche (a temperatura ambiente)
- 1/4 taza de mantequilla derretida
- 1 huevo (a temperatura ambiente)
Para el relleno:
- 1/2 taza de azúcar morena
- 2 cucharaditas de canela en polvo
- 1/2 cucharadita de nuez moscada
- 1/4 cucharadita de jengibre molido
- 1/4 cucharadita de clavo molido
- 1/2 taza de mantequilla blanda
Para el glaseado:
- 1 taza de azúcar en polvo
- 2 cucharadas de queso crema (a temperatura ambiente)
- 1 cucharada de jarabe de arce (o miel de maple)
Instructions
Paso 1: Preparación de la masa
- Mezclar ingredientes secos: En un bol grande, combina la harina, el azúcar granulada y la levadura instantánea. Mezcla bien los ingredientes.
- Preparar ingredientes húmedos: En otro bol, bate el puré de calabaza, la leche, la mantequilla derretida y el huevo hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados. Asegúrate de que la mezcla esté homogénea.
- Combinar ingredientes secos y húmedos: Agrega la mezcla húmeda al bol con los ingredientes secos. Con una espátula o cuchara de madera, mezcla hasta que se forme una masa suave.
Paso 2: Amasado y fermentación
- Amasar la masa: Vierte la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y amasa durante unos 5 minutos, o hasta que la masa esté suave y elástica. Si es necesario, añade un poco más de harina, pero con moderación.
- Dejar reposar: Coloca la masa en un bol ligeramente engrasado, cubre con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
Paso 3: Preparar el relleno
- Mezclar especias: Mientras la masa reposa, mezcla en un bol el azúcar morena, la canela, la nuez moscada, el jengibre y el clavo molido. Reserva esta mezcla para usarla más tarde.
Paso 4: Armar los rollos
- Estirar la masa: Una vez que la masa haya duplicado su tamaño, transfiérela nuevamente a una superficie enharinada y estírala con un rodillo hasta formar un rectángulo de aproximadamente 30×40 cm.
- Untar la mantequilla: Con una espátula o cuchillo, unta la mantequilla blanda de manera uniforme sobre la masa estirada.
- Añadir el relleno: Espolvorea la mezcla de azúcar morena y especias de manera uniforme sobre la mantequilla untada.
- Formar los rollos: Con cuidado, comienza a enrollar la masa desde uno de los lados largos hasta obtener un cilindro. Usa un cuchillo afilado para cortar el rollo en 12 rebanadas iguales.
Paso 5: Segunda fermentación y horneado
- Preparar la bandeja: Coloca los rollos cortados en una fuente para horno previamente engrasada, dejando un pequeño espacio entre cada uno. Cubre con un paño limpio y deja reposar durante otros 30 minutos para que crezcan un poco más.
- Hornear los rollos: Precalienta el horno a 175 °C (350 °F). Una vez que los rollos hayan reposado, hornéalos durante 25 a 30 minutos o hasta que estén dorados y bien cocidos.
Paso 6: Preparar el glaseado
- Hacer el glaseado: En un bol pequeño, bate el azúcar en polvo, el queso crema y el jarabe de arce hasta obtener una mezcla suave y cremosa. Si lo prefieres más líquido, puedes añadir una cucharadita de leche para ajustar la consistencia.
Paso 7: Servir
- Glasear los rollos: Una vez que los rollos estén tibios, rocíalos con el glaseado de queso crema. Sirve inmediatamente para disfrutar de su textura suave y cálida.