1. Preparar el Bizcochuelo:

Paso 1: Precalentar el horno a 180°C (350°F). Engrasar y enharinar un molde redondo de 22 cm de diámetro aproximadamente, para evitar que la masa se pegue durante la cocción.

Paso 2: En un bol grande, batir los 4 huevos junto con la taza de azúcar. Utiliza una batidora eléctrica a velocidad media-alta durante 8 a 10 minutos o hasta que la mezcla tome un color más claro y una consistencia espesa y cremosa.

Paso 3: Tamizar la harina y el cacao en polvo en un bol aparte. Luego, agregar estos ingredientes secos a la mezcla de huevos y azúcar de a poco, integrándolos con movimientos envolventes para mantener el aire en la mezcla. Esto asegurará que el bizcochuelo quede esponjoso.

Paso 4: Verter la mezcla en el molde preparado y hornear durante 25 a 30 minutos. Verificar la cocción introduciendo un palillo en el centro; si sale limpio, el bizcochuelo está listo.

Paso 5: Dejar enfriar completamente antes de desmoldar y cortar el bizcochuelo en dos capas.

2. Preparar la Cobertura y el Relleno:

Paso 1: Derretir los 200 gramos de chocolate amargo. Puedes hacerlo al baño María o en el microondas en intervalos de 20 segundos, removiendo entre cada intervalo para evitar que se queme.

Paso 2: Batir la taza de crema de leche con las 2 cucharadas de azúcar (opcional) hasta que forme picos suaves. Es importante no batir en exceso para que la crema no se corte.

Paso 3: Una vez que el chocolate se haya enfriado ligeramente, incorporarlo a la crema batida. Mezclar suavemente con una espátula hasta que ambos ingredientes se integren por completo.

3. Armar la Torta:

Paso 1: Cortar el bizcochuelo en dos capas uniformes. Colocar la base del bizcochuelo sobre un plato o base para tortas.

Paso 2: Extender una capa generosa de dulce de leche sobre la primera capa del bizcochuelo.

Paso 3: Colocar la segunda capa de bizcochuelo encima del dulce de leche, presionando ligeramente para que ambas capas queden firmes.

Paso 4: Con la mezcla de crema y chocolate, cubrir toda la torta, incluyendo los lados. Usa una espátula para alisar la superficie y lograr una apariencia prolija.

Paso 5: Decorar con frutos secos, almendras o incluso virutas de chocolate, según tu preferencia.