Preparación de las cebollas caramelizadas:

1. Cortar las cebollas: Comience cortando las cebollas en rodajas finas.
2. Cocinar las cebollas: En una sartén grande a fuego medio, derrita la mantequilla o agregue el aceite de oliva. Una vez caliente, añada las cebollas y una pizca de sal.
3. Caramelizar: Cocine las cebollas lentamente, removiendo de vez en cuando, durante unos 25-30 minutos o hasta que adquieran un color dorado profundo. Si lo desea, puede agregar una cucharada de azúcar para acelerar el proceso de caramelización.
4. Reservar: Una vez que las cebollas estén caramelizadas, retírelas del fuego y resérvelas para usarlas en la mezcla del pastel de carne.

Preparación del pastel de carne:

1. Precalentar el horno: Precaliente el horno a 375 °F (190 °C) para asegurarse de que esté a la temperatura correcta cuando coloque el pastel de carne.
2. Mezclar los ingredientes: En un tazón grande, combine la carne molida, el pan rallado, las cebollas caramelizadas, el queso rallado, los huevos, la leche y la salsa Worcestershire. Agregue sal y pimienta al gusto. Mezcle bien con las manos o una espátula hasta que los ingredientes estén bien incorporados.
3. Formar el pastel: Forme la mezcla en forma de pan o bloque y colóquelo en una fuente para horno engrasada o sobre una bandeja forrada con papel para hornear. Asegúrese de que esté bien compacto para que conserve su forma durante el horneado.
4. Hornear: Hornee el pastel de carne durante 45 a 50 minutos, o hasta que esté completamente cocido y dorado por encima. Puede comprobar si está cocido insertando un termómetro en el centro del pastel; debe alcanzar una temperatura interna de 160 °F (71 °C).
5. Reposar y servir: Una vez cocido, retire el pastel de carne del horno y déjelo reposar durante unos 5 a 10 minutos antes de cortarlo. Esto permite que los jugos se redistribuyan, lo que facilita el corte y mejora la textura.