Pastel de Piña Invertido Casero

Introducción

El pastel de piña invertido es un clásico que nunca pasa de moda. Su atractivo visual, con rodajas doradas de piña y cerezas brillantes, junto con su sabor dulce y húmedo, lo convierten en el postre perfecto para cualquier ocasión. Esta receta casera está llena de nostalgia, ideal para reuniones familiares, celebraciones o simplemente para consentirte con algo delicioso. Con ingredientes sencillos y pasos bien detallados, lograrás un pastel suave, jugoso y perfectamente caramelizado. Además, te ofrecemos variaciones, sugerencias de maridaje, beneficios para la salud y mucho más, para que domines esta receta de principio a fin.

Descripción General de la Receta

El pastel de piña invertido es un bizcocho que se hornea con frutas en el fondo del molde y se voltea al desmoldar, dejando la fruta como decoración en la parte superior. En esta versión, utilizamos rodajas de piña en almíbar y cerezas para decorar, un bizcocho esponjoso con un sutil sabor a vainilla y jugo de piña, y una base de caramelo hecho con mantequilla y azúcar morena que se funde con la fruta durante la cocción. Esta receta es fácil de seguir y requiere solo unos pocos utensilios básicos de cocina.

Historia y Origen del Pastel de Piña Invertido

El pastel de piña invertido tiene sus raíces en los Estados Unidos a principios del siglo XX. Aunque los pasteles invertidos existían antes con manzanas y otras frutas, fue con la llegada de las piñas enlatadas en la década de 1920, producidas por la Hawaiian Pineapple Company (hoy Dole), que esta receta ganó popularidad. La empresa realizó un concurso en 1925 para promover su producto, y se enviaron más de 2,500 recetas de pastel de piña invertido. Desde entonces, se convirtió en un ícono del recetario americano y se extendió rápidamente a América Latina, donde hoy es muy querido.

Ingredientes

Para el caramelo y base de piña:

  • 1/2 taza de mantequilla derretida

  • 1 taza de azúcar morena

  • 7-8 rodajas de piña en almíbar (escurridas)

  • Cerezas en almíbar (opcional, para decorar)

Para la masa del pastel:

  • 1/2 taza de mantequilla a temperatura ambiente

  • 1 taza de azúcar

  • 3 huevos

  • 1/2 taza de jugo de piña (preferentemente del almíbar)

  • 1 cucharadita de esencia de vainilla

  • 1 3/4 tazas de harina de trigo

  • 2 cucharaditas de polvo de hornear

  • 1/4 cucharadita de sal

Instrucciones Paso a Paso

1. Precalentar el horno

  • Precalienta el horno a 180°C (350°F) para asegurar una cocción uniforme desde el inicio.

2. Preparar el caramelo y la base de piña

  • En un molde redondo de 23 cm de diámetro, vierte la mantequilla derretida.

  • Espolvorea uniformemente el azúcar morena sobre la mantequilla.

  • Coloca las rodajas de piña escurridas sobre la mezcla de mantequilla y azúcar morena. Puedes organizarlas de forma decorativa.

  • Si deseas, coloca una cereza en el centro de cada rodaja de piña y algunas adicionales entre ellas para un toque más vistoso.

3. Preparar la masa del pastel

  • En un tazón grande, bate la mantequilla (a temperatura ambiente) con el azúcar blanca hasta obtener una mezcla cremosa y pálida. Este paso es esencial para lograr una textura esponjosa.

  • Agrega los huevos uno por uno, batiendo bien después de cada adición. Esto permite que los ingredientes se integren de forma homogénea.

  • Incorpora la esencia de vainilla y el jugo de piña, mezclando hasta que todo esté bien combinado.

  • En otro recipiente, tamiza la harina, el polvo de hornear y la sal. Tamizar los ingredientes secos ayuda a evitar grumos y mejora la textura del bizcocho.

  • Agrega gradualmente los ingredientes secos a la mezcla húmeda, batiendo a baja velocidad o de forma manual con espátula hasta integrar completamente. No sobre mezcles, ya que eso podría endurecer el pastel.

4. Hornear

  • Vierte la masa del pastel cuidadosamente sobre la base de piña, extendiéndola de forma uniforme con una espátula para cubrir toda la fruta.

  • Lleva al horno y hornea durante 40-45 minutos. Para comprobar si está listo, inserta un palillo en el centro: si sale limpio, el pastel está perfectamente cocido.

5. Desmoldar y enfriar

  • Una vez horneado, deja enfriar el pastel dentro del molde durante 10 minutos. Esto permite que el caramelo se asiente sin endurecerse.

  • Pasa un cuchillo por los bordes del molde para despegar el bizcocho.

  • Coloca un plato grande sobre el molde y voltea con cuidado. El pastel debería deslizarse suavemente.

  • Deja enfriar completamente antes de servir para que los sabores se asienten.

Tiempo de Preparación y Porciones

  • Tiempo de preparación: 20 minutos

  • Tiempo de cocción: 45 minutos

  • Tiempo total: 65 minutos

  • Rinde: 8-10 porciones

Sugerencias de Presentación y Maridaje

El pastel de piña invertido se disfruta mejor a temperatura ambiente o ligeramente tibio. Puedes acompañarlo con:

  • Una bola de helado de vainilla

  • Crema batida sin azúcar

  • Yogur griego natural

  • Un toque de canela espolvoreada encima

  • Infusiones como té de jazmín, té negro con limón o café suave

Este pastel también es excelente como postre después de una comida ligera o como complemento para un brunch.

Variaciones de la Receta

Si quieres experimentar, aquí tienes algunas ideas para darle un giro a esta receta clásica:

  • Con coco rallado: Añade 1/2 taza de coco rallado a la mezcla del bizcocho para un sabor tropical.

  • Pastel de piña y plátano: Sustituye 1/4 del jugo de piña por puré de plátano maduro.

  • Sin cerezas: Omite las cerezas y utiliza arándanos secos o trozos de mango deshidratado.

  • Versión integral: Sustituye la mitad de la harina blanca por harina integral para una opción más saludable.

  • Mini pasteles individuales: Usa moldes para cupcakes y coloca una rodaja pequeña de piña en cada uno.

Beneficios para la Salud

Aunque es un postre dulce, esta receta también ofrece algunos beneficios nutricionales:

  • Piña: Rica en vitamina C, enzimas digestivas (como la bromelina) y antioxidantes.

  • Huevos: Aportan proteínas de alta calidad, vitaminas del complejo B y minerales esenciales.

  • Harina de trigo (si se usa integral): Puede aportar fibra, mejorando la digestión.

  • Sin alcohol: Ideal para todos los públicos, incluidos niños y personas que evitan bebidas alcohólicas.

Puedes reducir el contenido calórico usando sustitutos de azúcar o mantequilla baja en grasa, aunque esto podría alterar ligeramente la textura.

Preguntas Frecuentes (FAQs)

¿Puedo usar piña natural en lugar de enlatada?
Sí, pero asegúrate de cocinarla ligeramente para ablandarla y extraer un poco del jugo para usar en la masa.

¿Puedo preparar el pastel con anticipación?
Sí, puedes hacerlo con un día de anticipación y almacenarlo en un recipiente hermético. Sabe incluso mejor al día siguiente.

¿Se puede congelar el pastel?
Sí, congélalo sin las cerezas. Envuélvelo bien en papel film y colócalo en una bolsa hermética. Dura hasta 2 meses en el congelador.

¿Qué puedo usar si no tengo polvo de hornear?
Puedes usar una mezcla de bicarbonato de sodio y cremor tártaro: 1/2 cucharadita de bicarbonato con 1 cucharadita de cremor por cada cucharadita de polvo de hornear.

¿Puedo hacer esta receta sin gluten?
Sí, sustituye la harina de trigo por una mezcla sin gluten que sea adecuada para repostería.

Conclusión

El pastel de piña invertido es un clásico atemporal, fácil de preparar y siempre impresionante tanto por su sabor como por su presentación. Esta receta combina tradición, simplicidad y versatilidad, permitiéndote adaptarla a tus gustos personales o necesidades dietéticas. Ya sea para una ocasión especial o como capricho dulce en casa, este pastel te hará quedar como un experto en la cocina. Anímate a prepararlo, compártelo con tus seres queridos y revive el encanto de los postres caseros.

¿Listo para sorprender a todos con este delicioso pastel de piña? ¡Manos a la obra!

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