Los rollos de calabaza y canela son una deliciosa opción para disfrutar durante la temporada de otoño. Combinan la suavidad de la calabaza con el cálido sabor de las especias, creando un postre irresistible. En esta receta, exploraremos cómo preparar estos rollos desde cero, asegurándonos de que cada paso sea fácil de seguir para lograr un resultado perfecto.
Introducción
Los rollos de canela son un clásico, pero cuando se añade calabaza a la mezcla, se obtiene un toque otoñal que hace de estos rollos un verdadero placer. La combinación de la masa suave y esponjosa con el relleno especiado de azúcar moreno y canela, todo cubierto con un glaseado de queso crema, es simplemente sublime. Esta receta es perfecta para acompañar con una bebida caliente y compartir con amigos y familia.
Descripción general de la receta
Esta receta de rollos de calabaza y canela es perfecta para aquellos que buscan un postre delicioso o un desayuno especial. Con ingredientes simples como harina, puré de calabaza, canela y queso crema, se pueden crear estos suaves y esponjosos rollos en un par de horas. La calabaza no solo añade sabor, sino que también contribuye a una textura más suave y húmeda. La combinación de especias —canela, nuez moscada, jengibre y clavo— aporta ese sabor cálido y reconfortante característico de los postres otoñales.
Historia y origen
Los rollos de canela tienen una larga historia en la repostería europea, siendo especialmente populares en países escandinavos como Suecia, donde se les conoce como “kanelbullar”. La receta tradicional de rollos de canela ha sido modificada a lo largo del tiempo, dando lugar a muchas variaciones. La incorporación de la calabaza es una adaptación más reciente, inspirada en la popularidad del puré de calabaza en la repostería otoñal de Norteamérica. La calabaza, originaria de América, ha sido utilizada en la cocina durante siglos, y su combinación con las especias ha resultado en una multitud de recetas creativas, como estos deliciosos rollos de calabaza y canela.
Ingredientes
Para la masa:
- 4 tazas de harina común
- 1/4 taza de azúcar granulada
- 1 paquete de levadura instantánea
- 1/2 taza de puré de calabaza (puede ser casero o enlatado)
- 1/2 taza de leche (a temperatura ambiente)
- 1/4 taza de mantequilla derretida
- 1 huevo (a temperatura ambiente)
Para el relleno:
- 1/2 taza de azúcar morena
- 2 cucharaditas de canela en polvo
- 1/2 cucharadita de nuez moscada
- 1/4 cucharadita de jengibre molido
- 1/4 cucharadita de clavo molido
- 1/2 taza de mantequilla blanda
Para el glaseado:
- 1 taza de azúcar en polvo
- 2 cucharadas de queso crema (a temperatura ambiente)
- 1 cucharada de jarabe de arce (o miel de maple)
Instrucciones
Paso 1: Preparación de la masa
- Mezclar ingredientes secos: En un bol grande, combina la harina, el azúcar granulada y la levadura instantánea. Mezcla bien los ingredientes.
- Preparar ingredientes húmedos: En otro bol, bate el puré de calabaza, la leche, la mantequilla derretida y el huevo hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados. Asegúrate de que la mezcla esté homogénea.
- Combinar ingredientes secos y húmedos: Agrega la mezcla húmeda al bol con los ingredientes secos. Con una espátula o cuchara de madera, mezcla hasta que se forme una masa suave.
Paso 2: Amasado y fermentación
- Amasar la masa: Vierte la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y amasa durante unos 5 minutos, o hasta que la masa esté suave y elástica. Si es necesario, añade un poco más de harina, pero con moderación.
- Dejar reposar: Coloca la masa en un bol ligeramente engrasado, cubre con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
Paso 3: Preparar el relleno
- Mezclar especias: Mientras la masa reposa, mezcla en un bol el azúcar morena, la canela, la nuez moscada, el jengibre y el clavo molido. Reserva esta mezcla para usarla más tarde.
Paso 4: Armar los rollos
- Estirar la masa: Una vez que la masa haya duplicado su tamaño, transfiérela nuevamente a una superficie enharinada y estírala con un rodillo hasta formar un rectángulo de aproximadamente 30×40 cm.
- Untar la mantequilla: Con una espátula o cuchillo, unta la mantequilla blanda de manera uniforme sobre la masa estirada.
- Añadir el relleno: Espolvorea la mezcla de azúcar morena y especias de manera uniforme sobre la mantequilla untada.
- Formar los rollos: Con cuidado, comienza a enrollar la masa desde uno de los lados largos hasta obtener un cilindro. Usa un cuchillo afilado para cortar el rollo en 12 rebanadas iguales.
Paso 5: Segunda fermentación y horneado
- Preparar la bandeja: Coloca los rollos cortados en una fuente para horno previamente engrasada, dejando un pequeño espacio entre cada uno. Cubre con un paño limpio y deja reposar durante otros 30 minutos para que crezcan un poco más.
- Hornear los rollos: Precalienta el horno a 175 °C (350 °F). Una vez que los rollos hayan reposado, hornéalos durante 25 a 30 minutos o hasta que estén dorados y bien cocidos.
Paso 6: Preparar el glaseado
- Hacer el glaseado: En un bol pequeño, bate el azúcar en polvo, el queso crema y el jarabe de arce hasta obtener una mezcla suave y cremosa. Si lo prefieres más líquido, puedes añadir una cucharadita de leche para ajustar la consistencia.
Paso 7: Servir
- Glasear los rollos: Una vez que los rollos estén tibios, rocíalos con el glaseado de queso crema. Sirve inmediatamente para disfrutar de su textura suave y cálida.
Sugerencias para servir y acompañar
Los rollos de calabaza y canela son perfectos para servir en el desayuno o como postre junto a una taza de café o té. También combinan muy bien con una leche caliente o una bebida especiada como el chai latte. Si deseas hacerlos aún más festivos, puedes añadir unas nueces picadas por encima del glaseado o un poco de ralladura de naranja para un toque cítrico.
Variaciones de la receta
- Rollos de calabaza con nueces: Añade nueces picadas al relleno para un toque crujiente.
- Rollos de calabaza y chocolate: Sustituye parte del relleno de azúcar moreno por chispas de chocolate para una versión más indulgente.
- Rollos de calabaza veganos: Para una opción vegana, sustituye la mantequilla por margarina vegana, el huevo por un sustituto de huevo o puré de manzana, y el queso crema por una versión vegana de este producto.
Beneficios para la salud
La calabaza es un ingrediente rico en nutrientes que aporta numerosos beneficios para la salud. Es una excelente fuente de vitamina A, que es esencial para la salud ocular y el sistema inmunológico. Además, la calabaza contiene fibra, que favorece la digestión, y antioxidantes, que ayudan a combatir el daño celular.
Preguntas frecuentes
¿Puedo usar levadura fresca en lugar de levadura instantánea? Sí, puedes sustituir la levadura instantánea por levadura fresca. La cantidad recomendada sería aproximadamente el doble de la cantidad de levadura seca.
¿Puedo congelar los rollos de calabaza y canela? Sí, puedes congelar los rollos antes o después de hornearlos. Si decides congelarlos antes de hornearlos, asegúrate de dejarlos descongelar y subir a temperatura ambiente antes de hornearlos.
¿Cuánto tiempo duran los rollos de calabaza? Los rollos de calabaza se mantienen frescos durante 2 a 3 días si se almacenan en un recipiente hermético a temperatura ambiente. Si los guardas en el refrigerador, durarán hasta 5 días.
Conclusión
Los rollos de calabaza y canela son una opción deliciosa y reconfortante para disfrutar en cualquier momento del día. Su combinación de especias, suavidad y el dulce glaseado los convierte en una excelente opción para compartir con seres queridos. Siguiendo esta receta paso a paso, lograrás unos rollos esponjosos, llenos de sabor y perfectos para cualquier ocasión.
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Rollos de calabaza y canela: Delicia otoñal
Description
Esta receta de rollos de calabaza y canela es perfecta para aquellos que buscan un postre delicioso o un desayuno especial. Con ingredientes simples como harina, puré de calabaza, canela y queso crema, se pueden crear estos suaves y esponjosos rollos en un par de horas. La calabaza no solo añade sabor, sino que también contribuye a una textura más suave y húmeda. La combinación de especias —canela, nuez moscada, jengibre y clavo— aporta ese sabor cálido y reconfortante característico de los postres otoñales
Ingredients
Para la masa:
- 4 tazas de harina común
- 1/4 taza de azúcar granulada
- 1 paquete de levadura instantánea
- 1/2 taza de puré de calabaza (puede ser casero o enlatado)
- 1/2 taza de leche (a temperatura ambiente)
- 1/4 taza de mantequilla derretida
- 1 huevo (a temperatura ambiente)
Para el relleno:
- 1/2 taza de azúcar morena
- 2 cucharaditas de canela en polvo
- 1/2 cucharadita de nuez moscada
- 1/4 cucharadita de jengibre molido
- 1/4 cucharadita de clavo molido
- 1/2 taza de mantequilla blanda
Para el glaseado:
- 1 taza de azúcar en polvo
- 2 cucharadas de queso crema (a temperatura ambiente)
- 1 cucharada de jarabe de arce (o miel de maple)
Instructions
Paso 1: Preparación de la masa
- Mezclar ingredientes secos: En un bol grande, combina la harina, el azúcar granulada y la levadura instantánea. Mezcla bien los ingredientes.
- Preparar ingredientes húmedos: En otro bol, bate el puré de calabaza, la leche, la mantequilla derretida y el huevo hasta que todos los ingredientes estén bien incorporados. Asegúrate de que la mezcla esté homogénea.
- Combinar ingredientes secos y húmedos: Agrega la mezcla húmeda al bol con los ingredientes secos. Con una espátula o cuchara de madera, mezcla hasta que se forme una masa suave.
Paso 2: Amasado y fermentación
- Amasar la masa: Vierte la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y amasa durante unos 5 minutos, o hasta que la masa esté suave y elástica. Si es necesario, añade un poco más de harina, pero con moderación.
- Dejar reposar: Coloca la masa en un bol ligeramente engrasado, cubre con un paño limpio y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
Paso 3: Preparar el relleno
- Mezclar especias: Mientras la masa reposa, mezcla en un bol el azúcar morena, la canela, la nuez moscada, el jengibre y el clavo molido. Reserva esta mezcla para usarla más tarde.
Paso 4: Armar los rollos
- Estirar la masa: Una vez que la masa haya duplicado su tamaño, transfiérela nuevamente a una superficie enharinada y estírala con un rodillo hasta formar un rectángulo de aproximadamente 30×40 cm.
- Untar la mantequilla: Con una espátula o cuchillo, unta la mantequilla blanda de manera uniforme sobre la masa estirada.
- Añadir el relleno: Espolvorea la mezcla de azúcar morena y especias de manera uniforme sobre la mantequilla untada.
- Formar los rollos: Con cuidado, comienza a enrollar la masa desde uno de los lados largos hasta obtener un cilindro. Usa un cuchillo afilado para cortar el rollo en 12 rebanadas iguales.
Paso 5: Segunda fermentación y horneado
- Preparar la bandeja: Coloca los rollos cortados en una fuente para horno previamente engrasada, dejando un pequeño espacio entre cada uno. Cubre con un paño limpio y deja reposar durante otros 30 minutos para que crezcan un poco más.
- Hornear los rollos: Precalienta el horno a 175 °C (350 °F). Una vez que los rollos hayan reposado, hornéalos durante 25 a 30 minutos o hasta que estén dorados y bien cocidos.
Paso 6: Preparar el glaseado
- Hacer el glaseado: En un bol pequeño, bate el azúcar en polvo, el queso crema y el jarabe de arce hasta obtener una mezcla suave y cremosa. Si lo prefieres más líquido, puedes añadir una cucharadita de leche para ajustar la consistencia.
Paso 7: Servir
- Glasear los rollos: Una vez que los rollos estén tibios, rocíalos con el glaseado de queso crema. Sirve inmediatamente para disfrutar de su textura suave y cálida.